Pasándoles revista a la Policía Nacional sobre su desempeño durante el año que acaba de finalizar, es de seguro que un gran número de la población daría su opinión favorable de que la institución se mantuvo muy activa en la prevención y en la soluciones de casos, logrando, sin equivocación alguna, un año satisfactorio en lo que concierne a la seguridad ciudadana.
Los esfuerzos desplegados por todos los hombres y mujeres que integran la institución las 24 horas y los 365 días del año, fue arrojando sus frutos todo el año. El modelo de gerencia y administración de policías ha sido novedoso y muy extenso, exhibiendo una tasa de disminución de la delincuencia, que en los primeros 6 meses, hasta junio, había experimentado “más de un 60% en comparación al año 2007, cuando los asaltos y atracos alcanzaron casi el 75 de los hechos delictivos cometidos”.
Insistimos, no con datos discordantes, ni se perciba como la famosa letras del merengue del “Caballo Ventura” titulado “éste disco se rayó”, que la Policía Nacional realizó un excelente papel en el concluido año 2008. Varías razones existen para sostener la teoría, primeramente, en lo que respecta a la seguridad ciudadana, se ha logrado mayor presencia policial en las calles, avenidas y plazas comerciales, tanto de la ciudad de santo domingo como en las provincias, con una Policía “eficiente, enérgica, debidamente uniformados y con una nueva imagen frente a los ciudadanos, en capacidad de dar respuesta en cada caso que lo amerite a la población.
Con mayor numero de flotillas de vehículos de motor, entre la que cabe mencionar, Camionetas de doble cabina, Motocicletas y modernas Yeepetas entregada por el gobierno del presidente Leonel Fernández, para aumentar y convertir más efectiva el nivel operacional de la institución del orden, con el patrullajes.
Se Observan en las intersecciones de las principales avenidas de la ciudad, cuatro miembros de la Policía bien identificados, con sus uniformes bien tratados y sus chalecos refractivos, bajo la supervisión de un oficial, realizando chequeos, “no redadas”, en lugares visibles y de manera muy técnica, reflejando que se esta en presencia de agentes con un alto nivel de formación académica.
La credibilidad y confiabilidad de la Policía fue ascendente como consecuencia de lo antes citado y sumado a ello, el recorrido por todo el territorio nacional, durante todo el año del Jefe de la uniformada para sostener contactos con los principales lideres comunitarios, religiosos, comerciantes, presidentes de clubes, junta de vecinos, amas de casas, donde en cada lugares dejó bien implantado “esta es una nueva etapa para que policías y comunidad trabajen juntos, haciendo hincapié en una policía comunitaria para evitar conflictos con la sociedad, que lleve orientación y solución de los problemas con métodos científicos”. Feliz Año, amigos lectores.
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