La Habana. Cuba espera que el presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, dé pasos de cara a "suavizar" el embargo norteamericano sobre la isla, dijo hoy la ministra cubana de Inversiones Extranjeras, Marta Lomas, quien se declaró "contenta" por la victoria del candidato demócrata.
"Por supuesto, estoy contenta de que haya ganado Obama, creemos que el pueblo de Estados Unidos se merece eso", aseveró la ministra a periodistas durante la Feria Internacional de La Habana (FIHAV), en lo que supone la primera reacción de un alto funcionario de la isla a la victoria de la víspera del candidato demócrata en Estados Unidos.
Según indicó, la victoria del demócrata es "una señal del cambio que necesita ese país".
Respecto a las expectativas de Cuba, Lomas señaló la esperanza de la isla en que el presidente electo pueda "suavizar" el embargo impuesto desde hace más de cuatro décadas.
"Si Obama hace alguna acción para suavizar el bloqueo, bienvenida sea y por supuesto que nos va a ayudar", dijo Lomas, quien sin embargo puntualizó que Cuba está "preparada" para que las "condiciones" del embargo "sigan igual".
En este sentido, puntualizó, los problemas de Cuba "tenemos que seguirlos resolviendo nosotros".
El presidente cubano, Raúl Castro, no ha emitido hasta el momento una reacción pública acerca de la victoria de Obama, que fue muy bien recibida entre la población de la isla en vista de que el demócrata había declarado su disposición a flexibilizar el tema de las restricciones de los viajes a Cuba y el monto de las remesas.
Cuba, que bajo el gobierno del menor de los Castro ha ofrecido hasta tres veces la posibilidad del diálogo con la Casa Blanca en cuanto cambie el actual inquilino, mantuvo una gran discreción durante los últimos meses de campaña electoral en el vecino del norte.
En ese tiempo, el único en la isla que habló públicamente de Obama y del derrotado candidato republicano John McCain fue el ex presidente Fidel Castro, quien la víspera había dedicado un nuevo artículo a las elecciones estadounidenses en las que ya vaticinaba la victoria del demócrata.
Castro ponderó a Obama como "más inteligente, culto y ecuánime" que su contrincante republicano, a quien calificó de "viejo, belicoso, inculto, poco inteligente y sin salud", aunque afirmó que durante toda la campaña se mantuvo "neutral" para que no pudieran acusarle de "injerencia".
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