Antes de iniciar mis palabras sobre nuestro interés de elaborar esta obra, concédanme unos minutos para profesar gratitudes eternas: Al Banco Popular Dominicano, Al señor jefe de la Policía Nacional, mayor general, lic. José Armando Polanco Gómez. Al Subjefe de la Policía, lic. Víctor Campusano Jiménez, Al mayor general, lic. Henry Peralta Jiménez, Al licenciado Bernardo Santana Páez, mayor general (S.P) Y al general Héctor García Cuevas.
Gracias, a todos, porque cuando le toque sus puertas para que me auxiliaran en lo económico para la impresión y puesta en circulación de lo que ustedes hoy son testigos, no titubearon en ofrecerme el apoyo moral y económico para que hoy podamos presentar esta Antología policial.
Gracias a todos, porque sin cada uno de ustedes no hubiese sido posible vivir este importante evento que para nosotros reviste un logro personal de gran magnitud.
Mi gratitud también para una persona que cuando lo designaron jefe de la Policía, lo vi por vez primera a través de la pantalla de un televisor de tubo, blanco y negro, que el gobierno municipal de mi pueblo tenia colocado en un closet en el Parque Sánchez de Las Matas de Farfán.
¡Qué alegría fue para nosotros! que después de tantos años, el Dios del cielo nos haya bendecido de estar frente a frente a esa persona (que vi por televisión en la puesta del sol, en el mes de julio de 1978) al ser recibido en su residencia para sostener un conversatorio de su experiencia como jefe, la cual será colocada en un próximo trabajo bibliográfico que está en fase de revisión. A la misma persona, hace aproximadamente dos meses nos apersonamos a su casa, sin cita previa ni nada por estilo, y nuevamente nos abrió sus espacios y le solicitamos que nos honrara en la presentación de la obra y él gentilmente aceptó.
Mil gracias, mi general Róbinson Brea Garó, por su excelente presentación, la cual engrandece la presente obra.
Agradezco profundamente la masiva asistencia de los señores pasados jefes de la Policía. A cada uno le llamé personalmente, e inclusive a los que residen en el interior del país, alejados de la capital, como es el caso de los mayores generales Rafael Guillermo Guzmán Acosta y Camilo Nazir Tejada, el primero me expresó (“con mucho gusto realizaré ese viaje”) y, el segundo me dijo (“No te dejaré solo, cuenta conmigo”) gracias infinitas a todos.
Igualmente agradezco a los Oficiales Generales, Oficiales generales en Servicio Pasivo, Oficiales Superiores y Subalternos, a mi esposa e hijos, a los representantes de mi apreciada familia Lorenzo Morillo, los ingenieros Temístocles, Adalberto y Migdonio, y, finalmente, a los amigos y colegas periodistas por su solidaridad, como siempre.
Les comento que cuando decidimos elaborar el tema que nos ocupa en el día de hoy, luego de haber terminado de verificar las fuentes primarias, fue para el año 2007. Pero, de repente abandonamos la idea y la dejamos sosegarse hasta que un día nos surge otras ideas y concluimos inventando otro tema y, como resultado de ese invento, nace nuestro primer libro que titulamos “TRAS LAS HUELLAS DE LA POLICIA NACIONAL DOMINICANA”, la cual colocamos en circulación en el mes de febrero del 2009.
Les confieso que la idea principal aun no la había concretizado, a pesar de publicar la obra anteriormente mencionada. Sin embargo, después de haber concluido de leer unos escritos de autor dominicano, que nos había obsequiado un amigo de infancia, del ensayista, cuentista, novelista, político y ex presidente de la República, ya fallecido, profesor Juan Emilio Bosch y Gabiño, encontramos una reflexión en esa literatura que resultó para nosotros bujía inspiradora, la cual el autor la dirige aun segmento importante de la sociedad, la juventud dominicana, cito:
“LOS JÓVENES QUE ASPIRAN A EJECUTAR SU OBRA DE UN DÍA PARA OTRO, SE EXPONEN A DESENCANTO DOLOROSO, PUES NADA QUE NO TENGA SUS RAÍCES EN EL TIEMPO, PUEDE PERDURAR. Y LA ÚNICA MANERA CONOCIDA DE ENRAIZAR ALGO EN EL TIEMPO, ES TRABAJANDO”.
Acogimos la recomendación del ilustre escritor dominicano. Empezamos a trabajar con el tema y desde la primera impresión que recibimos con nuestro primer trabajo, del interés de las personas en tenerlo en su anaquel, nos propusimos visitar algunas instituciones del Estado para colocar el libro y, en una ocasión llamamos al general Simón Antonio del Rosario Díaz y le dije (“comandante necesito un favor suyo, encamíneme hasta el despacho del comandante José Aníbal Sanz Jiminian en la Dirección de Migración. El general Simón nos dice, ¿Qué tú quiere con Sanz? ¡OH! Para que nos ayude en la adquisición de algunos ejemplares”). Logramos nuestro objetivo en visitar el mayor general Sanz Jiminian y una vez allí, el director de Migración gentilmente consintió la compra de 100 ejemplares y en el breve conversatorio que sostuvimos sobre el libro, nos insinuó el por qué no incluí todas las demás jefaturas, sólo le expresamos que el trabajo seria muy arduo y los recursos económicos muy limitados.
Lo que me había sugerido el mayor general y Ministro Sanz Jiminian coincidencialmente, a principio del mes de febrero pasado, se sumó a la misma sugerencia el también mayor general Henry Peralta Jiménez. Tenía dos peticionarios de mucho respeto que se habían identificados con nuestro primer aporte bibliográfico y, sumado a ello, luego de haber leído un libro del intelectual y estadista dominicano fallecido y ex presidente de la República, Dr. Joaquín Antonio Balaguer Ricardo, encontramos una sencilla, profunda y verdadera frase, que él mismo autor resalta y cito:
“LAS REALIZACIONES MATERIALES SUELEN SER TARDE O TEMPRANO ANULADAS POR LA ACCIÓN DEL TIEMPO, Y ¡AY DEL HOMBRE QUE FÍA SU DESTINO SOBRE LA TIERRA A COSAS SUSCEPTIBLES DE CAER BARRIDAS EN LA CONTIENDA DE LOS VIENTOS!”
Resulta gratificante para todo lector cuando lee cualquier escritor y su obra les deja alguna enseñanza, al fin al cabo eso es lo que se busca a través de los escritos, y como consecuencia de la concluyente frase anteriormente citada, es que decidimos aplazar para el próximo año la puesta en circulación del segundo tomo de “TRAS LAS HUELLAS DE LA POLICIA NACIONAL DOMINICANA” para darle paso a la primera Antología policial titulada: “POLICIA NACIONAL DOMINICANA, 75 AÑOS DE HISTORIA EN UNA SOCIEDAD DE TRANSFORMACIONES”.
Se aprecia a primera vista que hay una conexión directa entre el titulo y las imágenes iconográficas de la obra en portada. Notamos al hijo del pasado jefe de la Policía Emilio Ludovino Fernández Malagón, el también ex jefe coronel José Caonabo Fernández Gonzáles, ya en su condición de Intendente General, auxiliando una madre con su pequeño hijo en sus brazos, en los acontecimientos escenificados en octubre del año 1961, en Ciudad Nueva y, observamos en ese mismo escenario hoy, una presencia policial “proactiva” en labores de prevención. Además, en la contraportada, vemos las figuras de algunos jefes, que ellos como todos los demás, son los autores de esta obra y son los verdaderos transformadores de la Policía Nacional.
Tiene asimismo como novedoso un antecedente histórico muy bien estructurado, algunas frases que ustedes expresaron durante su gestión de Policía, imágenes íconograficas de los subjefes, desde el primero de ellos, Julio Amado Calderón Fernández, - (figura ésta que se implemento el 6 de mayo de 1955 por iniciativa del joven coronel Jefe, Luís Homero Lajara Burgos, )- y se ha conservado esa figura hasta hoy en días y, sobre todo, el libro contiene detalladamente todos los aportes dejados por ustedes, durante sus estadías en la jefatura de la institución del orden.
Señores y señoras, con la puesta en circulación de esta fuente bibliográfica, hemos evitado que los aportes dejados por ustedes sean borrados por la contienda de los vientos. Y más aun, lo que queremos dejar bien definido a las generaciones actuales y futuras de policías, es que si hoy disfrutan de mejores condiciones para garantizarles a la ciudadanía seguridad, ustedes, “formados en la escuela de sacrificios” –( como se lo hiciera saber al presidente de turno, Donals Reíd Cabral, al través de su misiva de renuncia del cargo como jefe de la Policial, el general Belisario Peguero Guerrero, el 18 de enero de 1965,)- acondicionaron cada uno en su época, el camino para que esas generaciones posean, mantengan y defiendan el espacio que le confiere la Constitución y la propia Ley Orgánica, a la mejor institución de servicios públicos de esta nación, ello es lo que ustedes han enseñado y dejado en todos estos largos años en la Policía Nacional, la cual cada día y en este preciso momento presenta credenciales de Eficiencia, Tenacidad, Perseverancia, Persistencia en labores de Inteligencias e Investigaciones criminales, la cual fue objeto de reconocimiento por el Secretario general de INTERPOL en Francia, señor Ronald Noble, cuando le expreso al través de un documento entregado al propio jefe de la Policía, y que la Agencia Francesa de Prensa difundió al mundo con el titulo “La Policía dominicana es de las mejores del mundo”. En lo que concierne a Tecnologías, por ejemplo, les menciono las instalaciones en 11 ciudades de la República, de Unidades bien equipadas de “Policía Científica” gracias al Acuerdo de Cooperación firmado entre Francia y la República Dominica, en el 2006, identificado como “Programa de Apoyo a la Investigación Criminal (PAIC). También, tenemos acuerdos en otras áreas, con otros países amigos, como (EE: UU, España, Alemania, Colombia etc.).
Esta Policía que ustedes han construido mantiene una capacitación continua de su personal, en la que la jefatura policial ha priorizado la educación como primer eje que ha asumido el país en su Plan de Desarrollo, al través de la cual las actividades educativas han sido retomadas con fuerza, disponiendo que oficiales generales, superiores, subalternos y alistados, refuercen sus habilidades policiales y conocimiento de la Constitución y en materia de respeto a los Derechos Humanos y en otras áreas del saber, mediante Diplomados, Seminarios, Cursos y Charlas y otros. Además, se becaron 75 miembros para que adquieran capacitación en centros universitarios al través del ISSPOL.
Esta política educacional no solo se está desarrollando en el plano local, sino también en el plano internacional. Como muestra de ello es la firma de un convenio que firmó el pasado año, el señor jefe de la Policía, mayor general José Armando Polanco Gómez, con el Sistema Universitario Ana G. Méndez, representado para esa ocasión por el Dr. José Méndez González, en función de presidente del Sistema y el Dr. Dennos Alicesa Rodríguez, Rector.
En ese centro universitario del “Turabo” Puerto Rico, nuestros policías participarán en Maestrías con especialidades en Balísticas, Investigaciones Forense y de ADN. Todo esto y otros que no hemos citados por asunto de tiempo, es la mejor apoteosis que le hace a una constante sociedad dominicana en transformaciones, la Policía Nacional dominicana, en su septuagésimo quinto aniversario.
En conclusión, señores y señoras, las ejecutorías desarrolladas por los jefes de la Policía Nacional en todos estos años, es el mejor regalo que podemos entregarles a sus descendientes, familiares, amigos y es la oportuna ocasión para que los y las estudiantes de los Centros de enseñanzas de la Policía, empiecen desde ya, a estudiar y analizar sus aportes y, es la apropiada demostración para que ellos y ellas encomien una antigua celebre frase, cito: “CUANDO ESTÉ TOMANDO AGUA LIMPIA, NO OLVIDES QUIEN HIZO EL POZO”.
Muchas gracias.